En mayo, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Argentina habría registrado un avance del 4,9%, impulsado por la postergación de incrementos y subas moderadas en algunos rubros. De confirmarse, este dato marcaría el quinto mes consecutivo de tendencia declinante, según la mediana de un sondeo de Reuters.
Este porcentaje sería el más bajo desde noviembre de 2022 (4,9%), de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Las estimaciones de 23 analistas locales e internacionales arrojaron un promedio del 5,1% para el IPC de mayo.
En cuanto a la inflación de mayo, podría terminar siendo algunas décimas más baja. Según nuestro relevamiento de precios, los alimentos subieron un 3,6%, lo cual es significativo dado el peso de esta categoría en el índice.
La postergación de aumentos regulados también juega a favor. Esta medida puede ayudar a controlar la inflación, aunque no es gratuita desde el punto de vista fiscal.
Las proyecciones de los analistas encuestados variaron entre un mínimo del 4,3% y un máximo del 7,1% para el IPC de mayo.
La postergación de tarifas y la retracción de los aumentos en las prepagas (medicina privada) contribuirán a la desaceleración del nivel general. Sin embargo, aunque también mostrará una disminución, el IPC Núcleo podría no bajar del 5%, evidenciando los límites de la desinflación, pese a que la inflación en los alimentos podría ser considerablemente más baja.
Recientemente, el ministro de Economía argentino, Luis Caputo, expresó que la inflación de mayo sería menor al 5%.
En mayo, la inflación núcleo disminuyó en comparación con el mes anterior. Esta tendencia sugiere que, de mantenerse, el IPC podría estabilizarse en un rango del 4% al 5% en los próximos meses, aunque aún quedan pendientes algunos incrementos de regulados.
El INDEC publicará el dato oficial del IPC de mayo el jueves por la tarde (1900 GMT), según su calendario de publicaciones.
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